Según Sigmund Freud, el fundador del psicoanálisis, “tenemos arte para compensar nuestra insatisfacción con el mundo y con nosotros mismos, o para atemperar nuestro dolor por una existencia fundamentada en la represión de los instintos”.
Las más importantes de las transgresiones de lo prohibido son el incesto, el homicidio, y el canibalismo. Según esto anterior todos seríamos en potencia posibles asesinos.